Reencuentro

Pues aquí estamos en Copenhague, la mar de navideñas, con unos gorros mezcla Papa Noel y Manu Chao que nos hemos comprado hoy para una cena danesa que tenemos mañana en la que hay que ir vestidos de esta guisa. Ni que decir tiene que éste es el gorro que siempre hemos anhelado tener, hoy por fin se ha cumplido nuestro sueño. Sólo nos falta la diadema con cuernos de reno y la zambomba y podremos salir a darlo todo a las calles de la ciudad, como si acabásemos de salir de el mercadillo de la Plaza Mayor (qué horror...)

Lucía está requetebién en este país nórdico y civilizado. Tiene millones de amigos que la quieren y le han hecho regalos geniales por su cumpleaños. Eso sí, como diría en Botellón de Passport: "no se priva de nada, le da al tarro, le tira los palomos, se enchufa al frasco y está todo el día borracha". Vamos, que se ha aficionado a la cerveza Dansk Pilsner (botella de 33cl a un precio de 26 céntimos), que da gusto verla...

Yo, por mi parte, lo de la bici lo llevo regulín regulán. Me estreso en los semáforos cuando detrás de mí se planta una troupe de ciclista equivalente a la del pelotón del Tour de Francia y tengo que salir adelante sin entorpecerles el paso. Un estrés, vamos... pero ya a la vuelta de casa hoy me he sentido un poco Indurain.

En fin, que estamos bien, nos acordamos mucho de vosotros, que esta noche saldréis por nuestro querido Tribu y que os echamos de menos.

Muchos besos con abrazos!