viernes, febrero 09, 2007

El arte de la guerra (leìdo werra)

Yo no sabìa que dos personas llamadas civilizadas pudieran decirse tantas cosas feas como las que se dijeron a gritos dos de mis compañeras de piso a la 1:30 de la mañana. No os voy a dar detalles que no os dejarìan dormir en estos tiempos difìciles de exàmenes difìciles. Pero las consecuencias, despuès de dìas de no hablarse, son que una de ellas deja la casa, y que yo, en caso de quedarme (non si sa), dejo mi habitaciòn para mudarme a la suya. Paso de una habitaciòn con vistas -a un patio interior- a una habitaciòn sin vistas, pero que cuesta un 44% menos. Y si alguien viene a verme, en caso de que me quede, tendremos que meter un colchòn medio debajo de la cama, porque entero no entra. Pero...alguien viene a verme? He aprendido a cocinar pasta con bròcoli, un plato fetèn: energètico, sano y sabroso a la vez. Y si no os gustan las verduras, pues nos comemos una pizza y un helado.
Y verèis que èste es el plan de mi viernes, que ahora subo y me pongo a estudiar y a beber tè hasta que el cuerpo aguante, asì mañana me levanto con un exceso de teìna en sangre, me hago creer que es resaca, y ojeras, y me miro en el espejo y me creo que he salido. Ay... menos mal que en las pausas nos montamos unas fiestas inigualables en la cocina: Alicia, tu disco nos està dando la vida, tambièn a las italianas. Besos, y avanti!
|